Una criptomoneda con proof-of-work se vuelve problemática si un minero (o un pool) consigue el 51% de la potencia (hashrate). Si este minero es malicioso puede no solamente censurar transacciones sino también ejecutar "gastos dobles".
Esto definitivamente ha ocurrido. Se me vienen a la mente altcoins que en 2013 o 2014 fueron "matados" con un ataque de estas características.
Pero aún con Bitcoin ya ha pasado que un pool (GHash.io,
en 2014) consiguió el 51% del hashrate. El pool no actuó de manera maliciosa, de hecho después voluntariamente bajó su potencia, pero si lo hubiera sido, podría haber hecho mucho daño. Hoy en día el pool más grande y potente (Antpool) tiene menos del 20%.
Para la red, un pool es "un único minero", aunque reciban su potencia de cálculo de muchos clusters de ASICs repartidos por todo el mundo. Esto hace que un pool con 51% sea igual de peligroso que un minero único con el 51%.