Un ataque 51% al Bitcoin, por el momento, se puede lanzar con aproximadamente 5-10 mil millones de dólares, teniendo en cuenta precios de "cloud mining" actuales. Eso quiere decir que un gobierno no tendría ningún problema de adquirir suficiente hashrate.
Pero hay un factor que pueda hacer que se termine "salvando" el Bitcoin, aún después de un ataque masivo:
Bitcoin es, en esencia, un proyecto social. Es decir, que es una comunidad cuyos integrantes pueden ejercer influencia sobre el consenso del sistema.
Un ejemplo fue el fork de marzo de 2013, cuando un grupo de mineros resolvió volver al protocolo antiguo cuando un cambio había causado una bifurcación en la blockchain.
Lo mismo puede pasar en el caso de un ataque destructivo:
La comunidad puede simplemente resolver usar un software con un protocolo cambiado, en este caso con otro tipo de PoW. El hardware de la entidad que lanzó el ataque se volvería inútil después del cambio. En teoría podría lanzar el ataque nuevamente, pero hay muchos algoritmos, por eso un ataque prolongado sería mucho más costoso que un simple ataque 51%.
El segundo ya es hablando a futuro y si no se toman las medidas necesarias, y es un ataque con computadoras cuanticas, usando esa tecnologia se pueden descifrar las claves de cualquier wallet pero es una tecnologia que aun no existe , y llegado el caso se pueden tomar contramedidas.
Una computadora cuántica solo puede "calcular claves privadas" cuando la clave pública haya sido publicada. Por eso, siempre se recomienda usar addresses nuevos luego de realizar transferencias, porque al transferir la clave pública es publicada.